El Ayuntamiento de Ciudad Real culminó esta semana la restauración de la escultura La Primavera, obra del escultor Jerónimo López Salazar que cumple cien años desde su inauguración. La intervención forma parte de un proyecto de conservación del patrimonio escultórico con una inversión de 30.000 euros que incluye también la restauración de la cruz del parque, La Apolonia del cementerio y la Virgen de García Donaire en la plaza del Carmen.
El concejal de Cultura, Pedro Lozano, visitó el final de los trabajos junto a la hija del autor, Carmen López-Salazar Pérez, y los restauradores del proyecto. La actuación consolida la pieza y asegura su conservación dentro de un plan municipal destinado a proteger las esculturas históricas de la ciudad.
El restaurador y director de Conservation Pro, Javier García Lozano, detalló que la escultura presentaba notable deterioro por acumulación de líquenes y algas, lo que obligó a aplicar tratamientos biocidas y técnicas de consolidación en las zonas dañadas. Durante el proceso, que se prolongó tres semanas, se descubrió la firma original del autor, oculta bajo la suciedad. La intervención, especialmente compleja por la ubicación de la pieza en el centro de una fuente, devolvió a La Primavera su forma original y equilibrio estético.
La escultura fue inaugurada el 14 de agosto de 1925, coincidiendo con el inicio de la feria, y representó en su época un símbolo de modernidad al mostrar un desnudo femenino en un espacio público.

